Una dieta saludable
Cuando la OMS habla de una alimentación sana en ningún momento habla de la necesidad de consumir productos de origen animal. La American Dietary Association va un paso más allá y dice lo siguiente: Las dietas vegetarianas planificadas adecuadamente, incluyendo las dietas vegetarianas totales o veganas, son saludables, nutricionalmente adecuadas y pueden proporcionar beneficios para la salud en la prevención y tratamiento de ciertas enfermedades. Las dietas vegetarianas bien planificadas son adecuadas para los individuos durante todas las etapas del ciclo de vida, incluyendo el embarazo, la lactancia, la infancia y la adolescencia, y para los atletas.
Una dieta basada en vegetales ayuda a prevenir 14 de las 15 principales causas de mortalidad, ayuda a tratar más de la mitad y puede revertir la progresión de algunas de ellas.
Los productos lácteos y las carnes contienen una gran cantidad de grasas saturadas. Al reducir la cantidad de grasas saturadas de nuestra dieta, mejoraremos nuestra salud tremendamente, especialmente la salud cardiovascular.
Un estudio británico indica que una dieta vegana reduce el riesgo de padecer cardiopatía y diabetes tipo 2. La dieta vegana es una gran aliada de la prevención de los infartos y otras dolencias cerebrovasculares.
Una dieta rica en cereales integrales es beneficiosa para la salud de muchas maneras, entre otros la reducción de la presión arterial alta.
Son ya numerosos los estudios que demuestran cómo una alimentación 100% de origen vegetal ofrece beneficios a la hora de reducir las probabilidades de padecer e incluso la posibilidad de frenar el progreso de varios tipos de cáncer, entre ellos el cancer de próstata, el cancer de colon, el cancer de mama.
La salud de los huesos depende de un equilibrio de proteínas, una ingesta adecuada de calcio, alto contenido de potasio y bajo contenido de sodio. Con una dieta vegana saludable, podemos alcanzar estos cuatro pilares del escenario perfecto para prevenir la osteoporosis.